Acupuntura
La acupuntura es una antigua medicina tradicional china en la que se insertan finas agujas en puntos específicos del cuerpo para activar varios procesos corporales. Es la terapia complementaria más arraigada y también se utiliza como tratamiento adicional en el cáncer.
Masaje
La terapia de masaje se utiliza cada vez más como tratamiento de apoyo en el cáncer, incluso en prestigiosos centros oncológicos. Originalmente, se utilizaba sobre todo por su efecto beneficioso y relajante. El masaje te ayuda a sentirte mejor y a manejar mejor el estrés y la ansiedad que conlleva el diagnóstico de cáncer. Pero el masaje hace mucho más que solo relajarte y hacerte sentir bien.
Aromaterapia
La aromaterapia consiste en el uso interno o externo de aceites esenciales derivados de plantas para prevenir o tratar ciertas dolencias o enfermedades.
Sauna
La sauna es una forma de termoterapia o terapia con calor que se ha practicado durante miles de años en varias partes del mundo como un ritual de limpieza, promoción de la salud, social y espiritual. Existen diversas formas de sauna, como la sauna finlandesa, el hammam turco y la banya rusa, cada una con diferentes estructuras, fuentes de calor y variaciones en la temperatura y la humedad.
Fitoterapia
La fitoterapia o medicina herbal es el tratamiento de dolencias y enfermedades mediante el uso de plantas o extractos vegetales, como hierbas y especias. La medicina herbal es, en realidad, la medicina tradicional original que se ha practicado durante miles de años. La medicina moderna, tal como la conocemos hoy, se deriva de la medicina herbal. Los componentes activos de las plantas primero se extraían de ellas para fabricar medicamentos más potentes. Después, se reprodujeron sintéticamente.
Ayuno
El ayuno es una práctica ancestral que normalmente se utiliza como una forma de depuración. No solo tiene valor religioso o ritual, sino que también es muy saludable.
Sueño
Dormir bien es uno de los aspectos más importantes — y de los más descuidados — de la salud. Por un lado, refleja una buena salud; por otro, ayuda al cuerpo a mantenerse sano.
Dormir lo suficiente y mantener un patrón de sueño regular es sumamente importante para que tu cuerpo tenga la oportunidad de recuperarse de todos los factores de estrés y para apoyar óptimamente tu sistema inmunológico.