Cuatro factores tóxicos importantes en la vida moderna son el exceso de estrés, el exceso de azúcar, el exceso de alcohol y fumar. Cada uno de ellos supone una carga considerable para el cuerpo, incluso para un cuerpo sano. Por lo general, suelen presentarse en combinación, ya que uno propicia al otro. Su efecto conjunto representa un obstáculo que no debe subestimarse.
El estrés, el azúcar, el alcohol y el tabaco no solo aumentan la probabilidad de desarrollar cáncer, sino que también socavan el éxito de cualquier tratamiento contra el cáncer, agravan los efectos secundarios del tratamiento y disminuyen las probabilidades de sobrevivir al cáncer.